En Kaito, cada parte de la carta está pensada para sorprender, y los hand rolls no son la excepción. Esta versión más informal del sushi, también conocida como temaki, se come con las manos y se disfruta al instante. Crujientes, sabrosos y llenos de matices, los hand rolls de Kaito combinan tradición japonesa con ingredientes que marcan la diferencia.
El equilibrio perfecto entre sencillez y sabor
Los hand rolls de Kaito se preparan al momento, lo que garantiza que el alga nori conserve su textura crujiente, el arroz esté en su punto justo y los ingredientes lleguen con toda su frescura. Cada uno es un bocado que habla por sí solo, sin artificios, solo buena técnica y producto excepcional.
¿Con cuál te quedas?
La carta incluye opciones para todos los gustos, desde los clásicos reinventados hasta propuestas más atrevidas. El Ebi Furai combina langostinos crujientes, aguacate, mayonesa de chili-garlic y migas de tempura. El Veggie Aguacate mezcla bonito seco con naranja y aguacate, una propuesta sencilla y llena de matices. El de Salmón se sirve con shichimi togarashi y tiene opción spicy para quienes buscan un toque más intenso. El de Atún llega con wasabi kizami y cebolleta, una combinación limpia y directa.
Si te gustan las texturas, el Ika ofrece chicharrón de calamar con alioli cítrico y tinta. El de Anguila sorprende con un suave toque de naranja. El Pargo se presenta en tiras al ajillo con aguacate y cilantro, fresco y sabroso. Y si prefieres sabores intensos, el Toro combina migas de tempura con cebollino para una experiencia crujiente y sofisticada.
Para quienes buscan algo diferente, el Kaito Especial incluye solomillo de ternera con whisky japonés. También hay opciones como el Soft Shell Crab con mayonesa de chili-garlic, o el Foie Gras con manzana caramelizada y salsa de anguila. El de Wagyu con cebolleta y wasabi premium es perfecto para cerrar con un bocado de lujo.
Hand rolls, la forma más directa de disfrutar Kaito
En cada hand roll hay cocina inmediata hecha para disfrutarse sin demora. Un formato que invita a relajarse, comer con las manos y dejarse llevar por la mezcla perfecta de texturas, frescura y sabor. Una experiencia que refleja la esencia de Kaito: cocina japonesa con alma propia.
